lunes, 28 de mayo de 2018

El Clave Bien Temperado

"EL CLAVE BIEN TEMPERADO"

-Johann Sebastian Bach-


"El clave bien temperado" o "El clavecín bien templado" (en alemán: "Das wohltemperierte Klavier", literalmente ‘el clave con temperamento bueno’, en contraposición a otros tipos de temperamentos), es el nombre de dos ciclos de preludios y fugas compuestos por Johann Sebastian Bach en todas las tonalidades mayores y menores de la gama cromática.
Como gran parte de la música de Bach, ninguno de los dos volúmenes fueron publicados en vida. Y también como gran parte de su música, se conoce la fecha en que fueron compilados, pero no en las que fueron compuestos, por lo que existen diversas especulaciones al respecto.
Lo que sí sabemos es que:
        -El primer volumen (que comprende los preludios y fugas del BWV 846 al BWV 869) fue terminado y compilado por Bach en 1722, aunque su primera impresión no llegará hasta mucho después de su fallecimiento, en 1801.
        -El segundo volumen (que comprende del BWV 870 al BWV 893) fue terminado y compilado en 1744, aunque también es probable, por el estilo, que muchos de sus preludios y fugas estuviesen compuestos antes de compilar el primero.
Ambos comparten el mismo esquema: cada libro comprende 24 grupos constituidos por un preludio y una fuga en la misma tonalidad. Empieza por la tonalidad de do mayor, y después la de do menor, a la que le sigue do sostenido mayor y así sucesivamente, hasta haber completado toda la gama cromática de mayor a menor. Es, por tanto, una colección enorme que comprende 48 preludios y 48 fugas cuyo objetivo es, a la vez, musical, teórico y didáctico.

"El Clave Bien Temperado" (I)


"El Clave Bien Temperado" (II)

Título de la obra e instrumentos de ejecución
Ambos libros son actualmente conocidos en castellano como "El clave bien temperado" (libro I y libro II). Sin embargo, el término «clave» aquí no es más que una deformación del original clavier, vocablo del antiguo alemán que ―en tiempos de Bach― se aplicaba a todos los instrumentos de teclado, clavecinesclavicordiosespinetasórganos, incluso el joven fortepiano.
Existen muchas opiniones respecto a los instrumentos con o para los que fueron compuestas estas piezas, pero dada la naturaleza abstracta de la música de Bach, resulta inútil discutir sobre ello, puesto que suenan igual de bien tanto en unos instrumentos como en otros, siempre que se interpreten coherentemente según el estilo y las posibilidades del instrumento. A pesar de que muchos de los preludios y fugas fueron compuestos pensando en un clavicordio o en un clavecín o en cualquiera de los dos, no existe ningún argumento de peso para desestimar al órgano o al piano en su ejecución. 
El clavecín y el clavicordio, instrumentos que se encontraban, en aquel tiempo, en su época de esplendor ―hegemonía que mantendrían hasta finales del siglo XVIII, cuando el pianoforte finalmente se impuso como instrumento de teclado―, eran ambos de uso habitual en Bach. Un gran número de las piezas que él compuso para teclado lo hizo pensando en ser ejecutadas por clavicordio, un instrumento de cuerda percutida que Bach tenía en alta estima porque le permitía acentuar y realzar libremente las voces en distintos planos. 
También el órgano era de uso común, pero es conveniente señalar que ninguno de los preludios y fugas de ambas colecciones cuenta con indicación alguna de pedales ni ninguna de las piezas cuenta con el tercer pentagrama típico del órgano ―parte que se interpretaría con el pedalier del órgano―, pentagrama que sí podemos encontrar en otras obras de Bach escritas expresamente para este instrumento.
Un único caso, la Fuga 20 BWV 865 en La menor del primer volumen cuenta al final con una nota pedal mantenida que, por la textura de la partitura en ese punto, sólo podría ser ejecutada convenientemente con el pedalier de un órgano -dado que los órganos de aquella época no solían estar afinados según el sistema temperado y que la tonalidad de La menor, sin alteraciones en la armadura, no presenta problemas de ejecución en el sistema de afinación antiguo-.
Bach, como muchos organistas de aquel tiempo para la práctica en el hogar, disponía de un juego de pedales para el clavicordio, de modo que, a pesar de la imposibilidad de tocarlo con un clavecín o un pianoforte, puede haberlo compuesto desde el clavicordio.
Por último, el reciente fortepiano o pianoforte, instrumento inventado por Bartolomeo Cristofori hacia 1698, no se conocía prácticamente fuera de Florencia en el momento en el que Bach compiló el primer tomo. El nuevo instrumento no llegó a Alemania hasta 1732, cuando Gottfried Silbermann construye su primer fortepiano. Se sabe que Bach probó uno de esos nuevos instrumentos en el taller de Silbermann y que su primera opinión no fue de aprobación, así como que el 7 de mayo de 1747, tres años antes de morir, cuando el rey Federico II el Grande de Prusia ―en una invitación a visitar la corte donde trabajaba su hijo Carl Philipp Emanuel― le pidió que improvisara un richercare en uno de los pianofortes Silbermann que poseía.
Aparentemente, poco más se conoce de su experiencia real con el piano. Sin embargo, Eva Badura-Skoda arguye que, a partir de un anuncio en el periódico de 1733 donde se anuncia la reanudación de los conciertos del Collegium Musicum de Bach con un comentario sobre un nuevo clavycimbel «cuyo gusto no ha sido oído aún por estas tierras», podría hacer referencia a un fortepiano, por lo que el piano sería una opción plausible para mucha de la música de los últimos años de Bach.

Aun así, se piensa que esta obra fue escrita para el clavicordio (instrumento casero y de volumen débil), ya que al analizarla, parece ser una obra con fines didácticos, y no para ser ejecutada en conciertos, en cuyo caso, el instrumento adecuado hubiera sido el clavecín, debido a su mayor sonoridad.​
En cualquier caso, conocida o no la predilección de Bach hacia el clavicordio por sus capacidades de gradación dinámica, capacidades que comparte con el piano, es el piano el instrumento con el que hoy día más se ejecuta toda la música de Bach.

La afinación temperada

El temperamento se refiere al tipo de afinación de los instrumentos musicales, incluida la voz humana. Las primeras formas de afinación eran las pitagóricas (o las de Aristógenes), en que la escala se dividía en doce partes desiguales matemáticamente perfectas por la regla de 3:2. Pero esos instrumentos sólo permitían ejecutar obras muy sencillas en una sola tonalidad, ya que en otras tonalidades sonaban terriblemente desafinadas (se generaban desagradables armónicos).
El «temperamento bueno» fue el que en la época de Bach permitió en mayor grado esa capacidad de ejecución en muchas tonalidades. Aunque el «temperamento bueno» es una evidente mejora barroca a la afinación griega antigua, de todos modos, para un oído moderno, las obras se siguen oyendo claramente desafinadas.
Existe una manera de afinar el instrumento ―que es la que se utiliza actualmente― de manera tal que los sonidos de todas las teclas contiguas están a la misma distancia, haciendo que todos los intervalos de medio tono sean idénticos (la octava se divide en doce intervalos logarítmicamente iguales). Se denomina «temperamento igual». A Bach le entusiasmó este sistema “temperado” pues permite modular de cualquier tonalidad a cualquier otra sin necesidad de reafinar el teclado. (La verdadera intención del Clave Bien Temperado es precisamente tocar una pieza en do, inmediatamente después una en do#, luego una en re y así sucesivamente, de lo que se deduce que contiene doce piezas en modo mayor, seguidas de doce en modo menor).
Este sistema de afinación, a pesar de sus evidentes ventajas, presentaba también algunos puntos en contra -llegando por ello incluso a ser calificado de "monstruosidad musical" por un alumno del propio Bach, Johann Philipp Kirnberger-, como son:
  • En el clavecín o el clavicordio, la afinación puede ser modificada ligeramente durante algunos momentos. Es posible que Bach encontrara ―aunque fuera de manera empírica― un método de ejecución que permitiera ejecutar esas modificaciones de un modo rápido para un intérprete experimentado.
  • Bach era de una generación que admitía y utilizaba, generosamente, las características propias para cada tonalidad; aportando, en su elección, el más riguroso cuidado. ¿Cuál es el interés para componer en el «sistema temperado» en Do sostenido mayor, con sus siete alteraciones en el clavecín, si el mismo fragmento suena de manera prácticamente idéntica en Do mayor? No es más que una cuestión didáctica la que induce a escoger este método, y se podría pensar que las obras en Do sostenido mayor pudieron estar compuestas inicialmente en Do mayor.
  • Se puede entender que la elección del «sistema temperado», en detrimento de la musicalidad, se elige por la facilidad de la modulación.
Sin embargo, sin el sistema bien temperado, que permitía las modulaciones a tonalidades lejanas de una manera inmediata, así como las enarmonías, no hubiese sido posible toda la evolución musical que siguió a partir del siglo XIX, así como una cantidad importante de la música vocal ya desde el Renacimiento.
Bradley Lehman ha señalado que la estructura del «sistema temperado» preconizado por Bach aparece de manera codificada en la línea de «rizos» que figura en el frontispicio de la obra. Según él, se trata de un «sistema temperado» muy dulce, que permite, efectivamente, el uso de todas las tonalidades, pero conservando unos colores diferentes para cada una: según este autor, las tonalidades en bemol son más dulces que las tonalidades en sostenido

Una de las mayores obras de la música occidental

El período durante el cual Bach compuso y reunió los elementos de este excepcional conjunto musical es, también, el del despliegue de la inventiva, de las teorías en busca del «sistema temperado» ideal. El «sistema temperado» estaba todavía lejos de ser unánime, y muchos eran los que soñaban con encontrar la vía de la modulación sin límites y sin contraindicaciones en un temperado irregular que tardará en encontrarse.

En este contexto, muchos compositores trataron ya de probar que todas las tonalidades son posibles. Entre 1702 y 1715, Fischer editó su obra Ariadna Música, conjunto de veinte preludios y fugas en veinte tonalidades diferentes, que debían de servir de hilo conductor al músico en el laberinto de las tonalidades más alejadas. Debido a que no usaba el «temperamento bueno», evitó la tonalidad de sol sostenido menor y todas las que utilizaban más de cinco bemoles o seis sostenidos. En esta idea es probable que se inspirara Bach. Ya su hijo Carl Philipp Emmanuel escribió que Fischer era uno de los compositores preferidos de su padre, lo mismo que PachelbelFrobergerKerll y algunos otros. En una de las fugas, Bach, que al igual que todos los compositores de su época, usaba temas ajenos para explotar todas las posibilidades contrapuntísticas que encerraban, echó mano de un tema perteneciente a la Ariadna Mvsica de Fischer.
Sin embargo, la obra de Bach sobrepasa, con mucho, a la de todos sus contemporáneos y concede a su autor la reputación de ser el mayor contrapuntista de todos los tiempos.

"El Clave Bien Temperado" es una obra única desde todos los puntos de vista: en este enorme conjunto musical, ningún preludio, ninguna fuga se parecen: las fugas contienen, en general, tres o cuatro voces, y muy raras veces, dos o cinco, y despliegan un ejemplo completo de los procesos contrapuntísticos. Los preludios son de una gran variedad melódica, rítmica y de construcción todavía más importante. Cada una de las piezas demuestra la maestría del contrapunto, que no prevalece sobre la estética, y tiene un sentido del desarrollo de la idea musical que no deja lugar a la repetición ni a la facilidad.

Después de Bach, la forma de «preludio y fuga» cayó en desuso, como si ya todo hubiera quedado dicho. De hecho, cuando Bach cayó prácticamente en el olvido después de su muerte, el Clavecín bien temperado ―del que numerosas copias manuscritas circularon durante el resto del siglo XVIII, dada la práctica habitual de la época de estudiar las obras copiándolas a mano― fue admirado y practicado en privado por los más grandes compositores: MozartBeethoven, etc.
Bach le dio una gran auge, se copió a sí mismo muchas veces e interpretó en muchas ocasiones la versión íntegra.

A continuación, mis preludios y fugas preferidos de esta gran colección, la más grande obra para teclado de la época barroca. 


Preludio y Fuga nº1 - Libro I - (Do M.)
*Curiosidad: este primer preludio, en Do M., de esta gran colección, fue tomado por el compositor francés del siglo XIX Charles Gounod como base de acompañamiento para su "Ave María".

Preludio y Fuga nº2 - Libro I - (Do m.)
*Parte de mi programa de 5º curso de piano (1992-93). 

Preludio y Fuga nº3 - Libro I - (Do# M.)

Preludio y Fuga nº5 - Libro I - (Re M.)

Preludio y Fuga nº6 (Re m.)
*Parte de mi programa de 5º curso de piano (1992-93).

Preludio y Fuga nº21 - Libro I - (Sib M.)

viernes, 18 de mayo de 2018

Lieder Ohne Worte

ROMANZAS SIN PALABRAS

(Félix Mendelssohn-Bartholdy)

"Lieder ohne Worte" (en español traducido como "Romanzas sin Palabras") es una serie de piezas de piano líricas cortas del compositor alemán romántico Felix Mendelssohn, escrita entre 1829 y 1845. Otros compositores, incluida su hermana Fanny, también escribieron piezas de este mismo género.

Música
"Romanzas sin Palabras" consta de ocho volúmenes, cada uno de las cuales está integrado por seis "canciones" o "romanzas" (esta última denominación es más apropiada, ya que el "Lied", la palabra original alemana, designa un tipo de canción romántica cultivada original y principalmente por compositores alemanes de esta época musical), que Mendelssohn compuso en varios momentos a lo largo de su vida y se publicaron por separado. 

El "Lied" (canción lírica romántica, o "romanza") es, en su origen (como detallo en la entrada que trata sobre El "Lied" Romántico, en este blog), una canción lírica interpretada exclusivamente por una voz de soprano con acompañamiento de piano, típica del romanticismo. Los temas tratados solían ser el amor, la naturaleza o la muerte. Se empezó a emplear este término y ya se dejó como tal así, en alemán,  porque, en un principio, era un género cultivado únicamente por compositores alemanes.

Lo que hizo Mendelssohn en esta recopilación de Lieder "sin palabras" fue, componer una colección de bellas melodías en que el mismo piano aglutinaba, gracias a la riqueza de posibilidades que ofrece este instrumento, ambas partes, melodía y acompañamiento: es el piano el que "canta" la melodía, normalmente con la mano derecha (aunque no es poco frecuente que la izquierda tenga pasajes melódicos), y a la vez la "acompaña" con el resto de notas que, simultáneamente, la "envuelven" y "armonizan", o marcan el bajo rítmico. 

Naturalmente, la melodía cantada por el piano carece de palabras, pero el sonido de la voz del piano crea esa música que no necesita palabras para expresar lo que el compositor desea, y esa fue la intención de Mendelssohn: escribir un conjunto de canciones para solista de piano cuya música refleja sentimientos románticos, que sin palabras puede expresar o describir lo que quiere decir, o la idea o emoción que quiere transmitir. Son auténticos "Lieder", que sólo difieren de su concepto original en la ausencia de voz humana y sus palabras (pero no del mensaje que se pretende transmitir).

El propio compositor, en cierta ocasión, dijo:

"Lo que la música que amo me expresa, no es demasiado indefinido para poner en palabras, 
sino por el contrario, demasiado definido".

(De lo que se desprende que la música, según él, va mucho más allá de lo que las palabras del lenguaje humano pueden expresar; es mucho más precisa).  

Valor musical

Las piezas de esta colección están al alcance de pianistas de diversas habilidades, no sólo a profesionales, lo cual contribuyó a su popularidad. El piano iba progresivamente adquiriendo popularidad en Europa a principios del siglo XIX, llegando a convertirse en un elemento estándar en muchos hogares de clase media, especialmente en Alemania, donde era común que algún miembro de cualquier familia de esta clase tocara este instrumento. A esta clase de intérpretes iban destinadas algunas de las piezas de la colección. Esta gran popularidad ha causado que muchos críticos subestimen su valor musical.

Las obras formaban parte de la tradición romántica de escribir piezas cortas líricas para el piano, aunque el concepto específico de "Canción sin palabras" era nuevo. La hermana de Mendelssohn, Fanny, escribió una cantidad de piezas similares y puede haber ayudado a inspirar el concepto de "Romanza sin palabras" ("Lied ohne worte"). El título "Romanza Sin Palabras" parece haber sido propia creación de él.

Mendelssohn también escribió otras canciones sin palabras, aparte de las recopiladas en estos ocho volúmenes. Existen versiones originales para muchas de las "Canciones", muchas de las cuales difieren sustancialmente de las versiones finalmente publicadas. En 2008, el pianista italiano Roberto Prosseda grabó una colección de Songs Without Words de Mendelssohn en una recopilación de 56 Lieder, de los cuales algunos nunca fueron grabados anteriormente.

Interpretación de "Lieder Ohne Worte" (las 48 romanzas de la colección completa), 
por Frank van der Laar.

Las "Romanzas" sin Palabras

Los títulos atribuidos a algunas de las canciones que se citan a continuación fueron dados por el mismo Mendelssohn. Otros fueron asignados a ciertas piezas por editores posteriores -no suficientemente fidedignos- y no son reflejo, ni mucho menos, del mensaje que el compositor pretendía transmitir. 

Libro 1, Op. 19b (1829–30)

  1. Andante con moto (Mi mayor)
  2. Andante espressivo (La menor)
  3. Molto allegro e vivace (La mayor)
  4. Moderato (La mayor)
  5. Poco agitato (Fa menor)
  6. Andante sostenuto: Venetianisches Gondellied ("Canción de la Góndola Veneciana") (Sol menor).

*Mi versión de "Romanza sin Palabras" nº1 (Libro I, nº1), en Mi M., de F.Mendelssohn-Bartholdy:

Libro 2, Op. 30 (1833–34) - (Dedicado a Elisa von Woringen)

  1. Andante espressivo (Mi mayor)
  2. Allegro di molto (Si menor)
  3. Adagio non troppo (Mi mayor)
  4. Agitato e con fuoco (Si menor)
  5. Andante grazioso (Re mayor)
  6. Allegretto tranquillo: Venetianisches Gondellied ("Canción de la Góndola Veneciana") (Fa menor)

  • La canción nº2 fue compuesta para su hermana Fanny con ocasión del nacimiento de su hijo en 1830.

*Mi interpretación de "Romanzas sin Palabras" nº12 (Libro II, nº6), en Fa# m., de F.Mendelssohn-Bartholdy:

Libro 3, Op. 38 (1836–37) - (Dedicado a Rosa von Woringen)

  1. Con moto (Mi mayor)
  2. Allegro non troppo (Do menor)
  3. Presto e molto vivace (Mi mayor)
  4. Andante (La mayor)
  5. Agitato (La menor)
  6. Andante con moto: Duetto ("Dueto") (La mayor)

  • La canción nº6 recibió el título de Duetto dado por Mendelssohn, ya que en ella yuxtapone dos melodías para representar a dos cantantes. Fue compuesta en Frankfurt en junio de 1836, poco después de conocer a su futura esposa. 

*Mi interpretación de "Romanzas sin Palabras" nº14 (Libro III, nº2), en Do m., de F.Mendelssohn-Bartholdy:

Libro 4, Op. 53 (1839–41) - (Dedicado a Sophia Horsley)

  1. Andante con moto (La mayor)
  2. Allegro non troppo (Mi mayor)
  3. Presto agitato (Sol menor)
  4. Adagio (Fa mayor)
  5. Allegro con fuoco: Volkslied ("Canción Folclórica") (La menor)
  6. Molto Allegro vivace (La mayor)

Libro 5, Op. 62 (1842–44) - (Dedicado a Clara Schumann)

  1. Andante espressivo (Sol mayor)
  2. Allegro con fuoco (Si mayor)
  3. Andante maestoso: Trauermarsch ("Marcha Funeral") (Mi menor)
  4. Allegro con anima (Sol mayor)
  5. Andante con moto: Venetianisches Gondellied ("Canción de la Góndola Veneciana") (La menor)
  6. Allegretto grazioso: Frühlingslied ("Canción de Primavera") (La mayor)


  • La canción No. 6, "Canción de Primavera", también fue conocida en Inglaterra como "Camberwell Green", (que es el lugar, en Londres, donde Mendelssohn la compuso mientras permanecía con los Benneckes, parientes de su esposa).

*Mi interpretación de Romanza sin Palabras, nº30 (Libro V, nº6), en La M., "Canción de Primavera", de F.Mendelssohn-Bartholdy:

Libro 6, Op. 67 (1843–45) - (Dedicado a Sophie Rosen)

  1. Andante (Mi major)
  2. Allegro leggiero (Fa menor)
  3. Andante tranquillo (Si mayor)
  4. Presto: Spinnerlied ("Spinner's Song") (Do mayor)
  5. Moderato (Si menor)
  6. Allegro non troppo (Mi mayor)

  • El Spinnerlied también recibió el sobrenombre de "Boda de las Abejas" (ya que el acompañamiento que envuelve a la melodía se asemeja al soniquete del voletear de las abejas).
Libro 7, Op. 85 (1843–45) - (Publicado a título póstumo)
  1. Andante espressivo (F mayor)
  2. Allegro agitato (La menor)
  3. Presto (Mi mayor)
  4. Andante sostenuto (Re mayor)
  5. Allegretto (La mayor)
  6. Allegretto con moto (Si mayor)

Libro 8, Op. 102 (1842–45) (Publicado a título póstumo)

  1. Andante un poco agitato (Mi menor)
  2. Adagio (Re mayor)
  3. Presto (Do mayor)
  4. Un poco agitato, ma andante (Sol menor)
  5. Allegro vivace (La mayor)
  6. Andante (Do mayor)

*Mi versión de "Romanzas sin Palabras", nº46 (Libro VIII, nº4), en Sol m., de F.Mendelssohn-Bartholdy:

Obras relacionadas

  • Una pieza en Re mayor para violonchelo y piano, compuesta por Mendelssohn alrededor de 1845. Publicada por primera vez después de su muerte y designada "opus 109" con el título de "Canción sin palabras", no está relacionada con ninguna de las piezas de piano de la obra que nos concierne. Calificada como "una composición exquisita, digna ser considerada entre las mejores que Mendelssohn haya compuesto para este género".
  • Una pieza para piano en Mi menor publicada también a título póstumo como "Albumblatt" ("La Hoja del Álbum"), bajo "Op. 117".
  • Una nueva pieza para piano también tras su muerte, sin número de opus, listada como "Woo 10", titulada Gondellied ("Canción de Góndola"). 

Probablemente estas últimas obras fueron destinadas a otro conjunto de "Canciones sin Palabras".

Arreglos

Mendelssohn hizo arreglos de dueto de piano de varias de las canciones que conforman el Libro 5 y la primera canción del Libro 6, que presentó a la Reina Victoria en 1844.

Otros arreglistas han realizado varios arreglos de algunas de las canciones de esta colección para diferentes agrupaciones instrumentales (orquesta, conjunto de cámara o instrumento solista con acompañamiento de piano). Por ejemplo, el violista alemán Friedrich Hermann (1828-1907), pupilo suyo, realizó un arreglo de 22 de estas canciones, para violín y piano.


En 1834, Franz Liszt escribió su "Grosses Konzertstück über Mendelssohns Lieder ohne Worte" (Gran Pieza de Concierto sobre "Romanzas sin Palabras" de Mendelssohn), para 2 pianos, basándose en las canciones 1-3 del Libro I, Op. 19b.

También se han hecho grabaciones de transcripciones, para instrumento solista y acompañamiento de piano, de estas romanzas escritas para voz, que se han titulado "Canciones sin palabras". Tales arreglos no fueron realizados por el compositor.